domingo, 18 de abril de 2010

Querida:


Perfume violento de ópalo, nevado sal.
Verde mica astillada entre mis labios.

Madre y piel.

Ombligo, sangrante manantial,
punto sagrado del recuerdo.

Fui tu cuerpo creciendo,
al ritmo de tus sangrantes líquidos.

Perfumadas linfas para mi sed primera.
Sed de mares olímpicos.
Sed.